martes, agosto 19, 2008

Not Real

Hoy vi un documental excelente. Quizá ya muchos lo vieron y se internalizaron con él. Se llama "The Secret", y relata el secreto para ser felices (en pocas palabras). Mientras lo veía, me di cuenta que muchchas de las cosas que se mostraban ya las conocía, y no por que las use a menudo, sino por que mi madre siempre nos decía que atraemos las cosas, tanto las positivas como las negativas; pero ante todo hay que estar agradecidos con lo que se tiene, aunque siempre queramos más, la base es disfrutar de lo real.

Aún así, el ser humano es por esencia ambicioso, siempre lo queremos todo, Para muchos el fin justifica los medios, otros consiguen lo que quieren ocultándose bajo una muralla de rectitud y buenos principios. Confieso que la perfección muchas veces se disfraza de daño...

Esta reflexión (que es somera en palabras más que en tiempo de madurarla) me recordó a un libro que se masificó tan groseramente que hoy entiendo a Erendis cuando toda esta ola de fanatismo repentino le produjo una desagradable suspicacia; las series Crepúsculo.

Como muchos de los que leen este blog saben que esta serie trata de la historia de amor de Bellas Swan y Edward Cullen, siendo este último un vampiro vegetariano. A lo largo de la historia, contada por la misma Bella, vemos cómo se enamora perdidamente del vampiro y soporta todo con tal de quedarse a su lado. ¿Por qué? ¿Qué es lo que Edward tiene que cualquier otro hombre no?

Empiezo.

- Edward Cullen es el primer hijo adoptivo de Carlisle y Esme Cullen, también vampiros. Tiene 17 años en su cuerpo, pero en vida muchos más. Tiene el don de leer los pensamientos de los demás, exceptuando los de Bella, lo que en un momento le trajo curiosidad para luego enamorarse de ella.

- Edward es en extremo inteligente, sabemos que ha estudiado en las universidades más importantes de Estados Unidos, y tiene estudios de medicina.

- Es muy alto, guapo y pálido. Bella lo considera como un dios encarnado por su despampanante belleza.

- Es comprensivo, gentil y muy caballero. En variadas partes de la historia, vemos cómo Edward actúa por el sólo interés del bienestar de Bella, prefiriendo sufrir él para que ella no sienta penas ni dolor.

-Es protectos. Dada la penosa condición de torpeza de Bella, Edward tiene a sobreportegerla, por sonsiderar que "llama al peligro"

Al leer los libros, el común de las mujeres peinsan que no hay nadie más perfecto que Edward, que es el hombre perfecto, ideal, etc. Yo pienso lo mismo, pero con la salvedad de que siendo éste un personaje de ficción creado por Stephenie Meyer, no existe.

Pero pensar así, trae un dejo de amargura hacia mis pensamientos, reflexioné. sin embargo me recuerda lo que vi en The Secret y cómo me criaron desde la infancia: ser agradecida por lo que se tiene, y pensé en mí como Bella:

- Quizá sólo percibamos la adoración hacia Edward por su casi indudable perfección. Aún así, prefiero pensar que Bella lo ama tal y como es, como cuando lo perdonó en Luna Nueva por su abandono, o por sus constantes dilaciones acerca de su único requerimiento para estar juntos para siempre.

- Las dificultades que vivieron, las extrapolé a lo que cotidianamente se da; como los roces entre la pareja, las decisiones, la mala onda que puede llegar a ti cuando encuentras a alguien, el esceptisismo que invade tu interior y a los demás cuando empeizas a confiar, el terror de tu familia para que no sufras, etc.

- La ley de la Relatividad es tan amplia que dar una explicación científica al respecto, sería malgastar esfuerzos; lo que para mi es significativo y real puede ser guano para los demás...

Podría dar miles de razones por qué Edward no es un dios, o por qué encuentro algo estúpido que la razón de que el libro y la próxima película gusten sea por él. Empero, ya no tiendo en caer en prejuicios superficiales, frente a verdades aparentes o autoconcebidas; ante lo que mi razón o manuela de vida dicen que es lo bueno y lo malo, lo correcto o no. The Secret hace entender que mientras sepamos lo que necesitamos y lo hagamos nuestro, está esperandonos cuanod menos lo esperemos.
Bella jamás esperó conocer al amor de su vida en Forks, ni menos que fuese vampiro ni tan perfecto como ella lo describe; es más, viniendo de una familia disfuncional, en donde sus padres la tuvieron siendo jóvenes, divorciados y teniendo su vida aparte del otro, hace que nos decepcionemso del matrimonio, las relaciones y hasta del amor verdadero. Nosotros somos dueños de escribir nuestra historia.

Por ejemplo, mis padres se casaron jóvenes; primer pololeo. Dificultades.. claro, pero nada que no pueda solucionarse. Mi infancia fue buena, difícil, pero buena. Tuve que aprender de muy pequeña que, ante las situaciones de p´resión, debía reaccionar con la mente fría y pensar en lo mejor para todo, barajando una infinidad de soluciones posibles. Si fuese por eso y como en un principio fue, tendría la idea de que mi primer pololeo sería para toda la vida y que no importando las dificultades saldría adelante, tendría que ser una amargada por que a mi ehrmano le dieron más atención que a mí, por yo no tener las dificultades que él tuvo, tendría que no quererlo paranada, por que yo no me podría equivocar las veces que él se equivoco (bajo mi punto de vista); tendría que pensar que amar no trae nada bueno, por que te hace hacer estupideces, que los amigos la mayoría de las veces te buscan por interés, ya sea por que quieren algo de tí, por que compartes situaciones comunes con ellos, por que mientras no los decepciones estarán a tu lado, mientras les hagas favores también estarán a tu lado, etc.

En fin, tendría que ser una persona bastante amargada, por que traería a mi vida las cosas que exactamente no quiero, espantaría las cosas buenas por miedo, dejaría de disfrutar de cada detalle...

Hoy amo a mi hermano por sobre todas las cosas, a mi familia por confiar en mi a pésar de todas las veces que los he decepcionado; como persona e hija, me he pegado porrazos fuertes amorosamente, pero me he recuperado y he sabido volver a empezar.

¿Por qué? Por que así como Bella con Edward, creop que la felicidad se da en más que perfección; ya no quiero ser perfecta... Quiero ser Michelle y las personas que estén a mi lado entre más imperfectas que sean mejor, por que me complemento con ellas y disfruto de las cosas que son de verdad... una discución, un roce. Quiero enfocar lo que más deseo y sentirlo mío y parte de mi, como también agradecer por mi vida, por mi familia, por mis humildes cosas materiales, por darme la posibilidad de ser mejor día a día, por los amigos y la gente a mi alrededor...

Quizá tenga a Yoda en mi cabeza todo el tiempo, diciéndome que debo desaprender lo que aprendo, que debo poner atención en lo que hago y yo interpretando todo como una constante abstracción del mundo... Así como en las películas, la música y los libros... no me fanatizo por que son moda, o por que muestran lo que no puedo tener y lo anhelo con toda el alma. Les saco lo que más puedo... como a la vida misma

1 Análisis:

Erendis dijo...

Mi niña, primero que todo:
>¿Viste Clone Wars?

>>Ahora me entiendes con la masificación de Crepúsculo. Pero yo no busco nada perfecto, y en realidad me gusta el personaje de Carlisle antes que el de Edward. Me muero de lata un tipo como él, tan "fresita", y eso me distingue de muchas chicas: yo ya llevo tantos años con mi Batman, que en serio, él es todo para mí. Edward sirve para buscar el hombre perfecto, pero ... ¿lo buscan? nadie hace nada y se angustian....

>>> The Secret me parece un bodrio. Tuve la mentalidad de The Secret hasta como los 20 años. Yo no anhelo muchas cosas; no me interesa que me vaya bien, que las cosas me gusten, que la gente me quiera... no vivo para sentirme así. Todo lo que me mantiene viva es la atemporalidad de mi vida, el hecho de estar viviendo en una época que no me representa ni me atrae. Y es el core de mi libro además, así que con más ganas... tengo que terminarlo.

>> No busques la perfección. Nada lo es. Créala en ti misma pero sin caer en el estremo egocéntrico: más bien es hacer las cosas bien, por que otros disfruten de ellas.

Espero vayas el 30, te quiero muxo.
Erendis